Mi promesa se cumple en esta tarde
y la sopa de fideos se esta haciendo,
muy caliente pues la cosa esta que arde
y echa humo, el caldo esta cociendo.
Una punta de jamón se ve nadando;
una hoja de laurel, dara buen gusto;
un buen apio y un buen puerro van dejando
los sabores que encierran, es lo justo.
Calabaza, la zanohoria, cebolleta;
un nabito, no muy grande, da alegria
para hacerte gozar en compañia.
Una vez que se hierva lo mentado
y se cuelen esos restos de verduras,
los fideos mostraran sus hermosuras.
Emilio Medina M.
5 Octubre 2010
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¡Qué sopa, dios del cielo, yo matara
por meter en tal plato la cuchara!
Esos fideos cual hebras de oro...
ese blancor del plato -que ni poro
ni fisura ni china nos demuestra
ante el embate de la hambrienta diestra-,
el color del caldito que promete
alzarnos al cielo del taburete.
Y si hubo quien la primogenitura
por lentejas vendiera, por ventura
no conoció esta sopa sacrosanta
que todo jugo gástrico levanta.
Blanca Barojiana
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Diome trabajo la dama alborotada
pues he de guardar en mi despensa,
esa bella alegoria que dispensa
que la sopa por calor, quedo agarrada.
La he dejado "pelin" disimulada
con caldito de una buena berengena,
es por eso que le sabe muy rebuena
aunque al gusto la noto muy pasada.
Le reclamo a la dama sus perdones
y encamino mi andar a la despensa,
para dar emocion con los jamones.
No me rete, no me siento con ofensa,
y la sopa retiremos de la mesa,
que ha quedado ya muy fria, medio tiesa.
Emilio Medina M.
5 Octubre 2010.
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OVILLEJOS
Pues ya que es la berenjena
Muy buena
De tu huerto sin dudar
Has de dar
Sin sentir ninguna afrenta
Cuenta.
Pues no mermará tu renta,
En merecido homenaje
De ella, sin ningún ambage,
Has de dar muy buena cuenta.
Del jamón ¿qué te diré?
Ya sé
Que es lo más de cualquier cosa
Sabrosa
Tanto que a la berenjena
Apena.
Pues cásalos en tu cena
Y echa buen vino en tu copa
Que zamparse una gran sopa
Sabrosa, ya sé no apena.
Blanca
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Me voy a comprar un queso,
algo lejos,
depues de lo comprado
y ya llegado,
estrujo mis meninges
y te cuento,
que esta el señor Cervantes
muy contento.
Emilio
