viernes, 11 de abril de 2008

Demora

Demorado en la llaga del invierno,
recibe el rostro
la pétrea caricia del olvido.
El espejo no reproduce la sonrisa de antaño.
El lápiz de labios escribe una nota de suicidio.
Demorada en la tela de araña de la inercia,
la mano que suplica se convierte en lágrima.
El tren tarda sólo seis estaciones para llegar a la locura.
La sintaxis cloquea como un celular sin batería.
Una intermitente lluvia con granizo
cae sobre la paralizada mañana.
No prosperan los besos que se sembraron
en el minuto del amor.
Demorado en el interior cósmico del que escribe,
un niño pide limosna.

Jorge Luis Estrella



Demorado en la pústula del infierno
recibe el papel
la ríspida caricia del carbón.
La pluma no refleja la felicidad conocida.
El cortaplumas ríe a carcajadas su función.
Demorada en la línea que no dobla
la musa suspende sus pliegues de madam.
La vida se asemeja a una zanja sin fondo.
La neblina pide a gritos que le permitan pasar
en tanto retoca su rostro con polvo blanco.
No germina la semilla de creatividad que
el poeta sembró antaño.
Demorado en el interior del genio de las letras,
un recién nacido rompe la bolsa de agua.

Liliana Varela

No hay comentarios: