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Sospeché la geografía de ese cuerpo hermoso.
La isla nacería, su décima esfera de Caribe,
sus chispas de tikkum entre las olas,
extensión de su materia y su monte santo
en el centro de Luquillo.
Nacería, Ella / Isla
entre pepinos y lícuos culebrinas
a las afueras del Valle del Yagüeca,
entre añascos y lares-libertarios.
La novia vive, dije,
predicha en la corona de Kether,
el punto primordial, lo oculto de lo oculto,
y por nueve caminos la busqué
hasta que dijo: «Existo».
Carlos Lopez Dzur
------------------
............."La novia vive, dije,
..............predicha en la corona de Kether"
..............Carlos Lopez Dzur
Elevarme...
destruyendo el pensamiento
que me enraiza al suelo
(volviéndome mortal)
Existir
sin un estado de existencia
sin causa ni efecto,
con la pasividad de la inercia
(no inútil, no activa)
Trascender
sin forma ni materia
sin negativos velos
(que dualicen la corona)
Reabsorver como Kether
los etéricos estados que dominan al hombre
(que encarcelan y torturan la misma carne
que originan)
Des-encarnarnos
mente abierta hacia el árbol de la vida
(hacia los tres supremos que equilibran).
Lograr la complicidad
de la naturaleza
para sanar el cuerpo
el alma...
para sanar a Dios.
Liliana Varela
La isla nacería, su décima esfera de Caribe,
sus chispas de tikkum entre las olas,
extensión de su materia y su monte santo
en el centro de Luquillo.
Nacería, Ella / Isla
entre pepinos y lícuos culebrinas
a las afueras del Valle del Yagüeca,
entre añascos y lares-libertarios.
La novia vive, dije,
predicha en la corona de Kether,
el punto primordial, lo oculto de lo oculto,
y por nueve caminos la busqué
hasta que dijo: «Existo».
Carlos Lopez Dzur
------------------
............."La novia vive, dije,
..............predicha en la corona de Kether"
..............Carlos Lopez Dzur
Elevarme...
destruyendo el pensamiento
que me enraiza al suelo
(volviéndome mortal)
Existir
sin un estado de existencia
sin causa ni efecto,
con la pasividad de la inercia
(no inútil, no activa)
Trascender
sin forma ni materia
sin negativos velos
(que dualicen la corona)
Reabsorver como Kether
los etéricos estados que dominan al hombre
(que encarcelan y torturan la misma carne
que originan)
Des-encarnarnos
mente abierta hacia el árbol de la vida
(hacia los tres supremos que equilibran).
Lograr la complicidad
de la naturaleza
para sanar el cuerpo
el alma...
para sanar a Dios.
Liliana Varela
PD: perdón Carlos por jugar con tu epígrafe ; por diferenciar mis ideas quizás de las tuyas. Lo mío es puro subjetivismo plagado de mucha ignorancia pero deseos de aprender.
besos
besos
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